Los parques nacionales seducen a los visitantes

Interior / El Baritu, El Rey, Los Cardones

Los Cardones es el que está más a mano. Los demás permanecen casi aislados, aunque por ello, inalterados

Orgullosa, Salta protege y muestra sus paraísos. Declarados como Parques Nacionales la provincia ofrece a sus visitantes tres magníficas áreas de reserva de vida vestidas de distintos colores y perfumadas de naturales aromas.

Por su ubicación y accesibilidad, Los Cardones es el anfitrión más visitado, donde sensibles y hermosos cardonales vigilan el desierto, sus historias y huellas del paso de pobladores prehispanos.

En esta época, aproximadamente 30 automóviles diarios paran en la zona y sus ocupantes sacan fotografías y recorren el lugar, según informó Sergio Bikauskas, intendente del parque. "Durante el año pasado se registraron 8.553 visitas en el puesto de gurdaparques, pero se estima que fueron entre 20 y 25 mil los visitantes (en especial sobre la recta del Tin Tin), pues no todos pasan por nuestra oficina", explicó.

En este puesto se brinda informes sobre el parque, guías y los atractivos de los pueblos vallistos vecinos. En cuanto a hospedaje, en el parque no se puede acampar, pero Cachi y San Carlos ofrecen campings, hoteles, hosterías y casas de familias para alojarse.

Asimismo, cuentan con comedores y restaurantes, los que en estos días se ven desbordados de comensales, por lo que los operadores turísticos piden paciencia a los viajeros y la ampliación de horarios de atención a los propietarios de los locales.

Tal es el volumen de turistas ávidos de información que "se está restaurando un almacén de principios del siglo XX -adelantó Bikauskas-, para funcionar como centro de informes del parque en Piedra del Molino".

Si bien en vacaciones invernales y en Pascuas se observa gran cantidad de visitantes en esta región, la movilidad turística se mantiene durante todo el año. Muy distinto es lo que pasa en el resto de los Parques Nacionales de Salta, que en temporadas estivales se tornan inaccesibles y ocultan celosos sus bondades.

El lujurioso Baritú

Hacia el Norte del provincia, entre los departamentos Orán y Santa Victoria, gigantes exponentes de la selva de montaña componen el Parque Nacional Baritú, donde permanecen casi intactos gracias al relativo aislamiento en el que se encuentran.

Esta área de más de 72 mil hectáreas, surcada por numerosos arroyos y ríos, ofrece a los visitantes un imponente paisaje de cedros salteños que llegan a superar los 40 metros de altura, lianas, helechos gigantes y orquídeas, entre una amplia variedad de especies.

"Por ser un parque prácticamente aislado, la demanda turística aquí no es muy alta. En invierno, se llegan a recibir entre 60 y 70 personas, quienes eligen esta región por sus atractivos naturales y las aguas termales", detalló Matías Entrocasi, intendente del Baritú. "Durante 2006 se registraron 300 visitantes entre argentinos y extranjeros", agregó.

Si bien el parque no cuenta con infraestructura adecuada para el visitante, pues no posee hostería ni camping, Los Toldos (la localidad más importante de Santa victoria Este) cuenta con albergues, cabañas, casas de familia, comedores y supermercados para una cómoda estadía.

Dentro del parque viven alrededor de 100 pobladores que muchas veces guían a los visitantes para realizar caminatas o cabalgatas por senderos agrestes. Actualmente se está construyendo un sendero que dentro de un mes podrá ser usado para recorrerlo y apreciar las virtudes de la zona, según informó Entrocasi, quien además explicó que la temporada ideal para conocer el parque es durante invierno, dado que en la época estival las precipitaciones son abundantes y hacen inaccesible el lugar por la creciente de los ríos y el suelo empantanado.

En cuanto a su fauna, el Baritú cobija abundantes especies de animales, algunas de ellas en peligro de extinción como el yaguareté y el ocelote. Entre las aves, habitan "águilas arpías" (el águila más grande del mundo), tucanes, halcones, tijeretas y garzas.

El Rey, nevado,tuvo un encanto inigualable

Un hecho inédito para los memoriosos se registró el pasado 9 de julio en Parque nacional El Ray, dado que se registró una fuerte nevada en un gran sector del mismo, lo que convirtió a su natural belleza en un encanto inigualable, nunca antes visto por guardaparques y lugareños.

Con más de medio siglo de su creación, el Parque Nacional El Rey, en el departamento de Anta, protege una gran diversidad de especies de flora y fauna autóctona, muchas en peligro de extinción (como el tapir, el lobito de río y el pato crestón).

Abarca más de 44 mil hectáreas que preservan un interesante sector de selvas de montañas, de transición y bosques montanos. Su belleza capta la atención de innumerables turistas que habitualmente se acercan a las oficinas de informes del parque, donde buscan la forma de acceder a este paraíso.

Acceso difícil

Pero muy pocas veces logran satisfacer el entusiasmo de visitarlo, pues los accesos son dificultosos, ya que se deben cruzar varios ríos y arroyos que en los meses estivales se muestran peligrosamente crecidos."Por eso, la demanda de turista a este parque es escasa. A veces tratamos de disuadir a aquellos que vienen en automóviles pequeños porque pueden quedar varados en las cuencas", informaron desde la oficina administrativa de El Rey. La zona es escabrosa y las dificultades de acceso y circulación dentro de sus límites contribuyeron en gran parte a que permanezca inalterada su riqueza.De todas formas, la estación más recomendada para conocerlo es la de invierno, considerada como la época seca en la que se registra una importante disminución de las precipitaciones."Durante el año pasado registramos por mes el ingreso de hasta 100 personas, siendo el verano la temporada baja", detallaron desde Parques Nacionales.

Un proyecto en carpeta

Entre las argumentaciones que frenan el fomento del turismo en esta región se resalta la falta de alojamiento y de condiciones sanitarias adecuadas, dado que el camping agreste del parque no cuenta con esas instalaciones ni conexiones de agua corriente."Si bien existe un proyecto par restaurar la vieja hostería de El Rey (cerrada en el '87), cobra más fuerza la idea de sumar a los propietarios de tierras aledañas, quienes podrían ofrecer albergue y ecoturismo en la región", informó Flavio Moschioni, biólogo de la Delegación Regional de Parques Nacionales.Actualmente, el Centro administrativo del parque cuenta con mesadas y asadores, letrinas, agua y luz, al igual que la seccional Papoyán.

La novel reserva de El Nogalar

A casi 2 kilómetros al Oeste de Los Toldos, densos bosques de nogal criollo y cuantiosos cedros y pinos del cerro conforman la Reserva Nacional El Nogalar, que desde el año pasado administra Parques Nacionales, tras la donación de la finca San José de Huaico Grande y Pedregal.

El Gasoducto Norandino donó estas tierras en compensación por impactos causados por la obra y la traza del ducto. El fin fue crear un área natural protegida que contenga zonas intangibles y de reserva.

Su demanda turística aun es mínima, pues muy pocos conocen de su existencia. Igualmente, ésta es la época del año más propicia para visitarla. Allí existen espacios de uso público, fogones y senderos interpretativos. Se pueden realizar cabalgatas y caminatas cortas y larga, además se puede recurrir a la oficina de la Reserva para evacuar todo tipo de consultas sobre la región.

"En la primera semana de estas vacaciones de invierno se registraron sólo 20 turistas, pero se estima que en estos días llegarán más visitantes dado que las provincias más grandes están aún en vacaciones", comentó Fernando Dobrotinich, encargado de la Reserva.

En esta área se trabaja en comunión con los pobladores, quienes guían a los viajantes y procuran la conservación del lugar. Sin embargo, se observan áreas degradadas por el ingreso de ganado vacuno a los pastizales. "El sobrepastoreo de animales deja importantes signos de erosión, por lo que se busca la colaboración de algunos lugareños descuidados", detalló Dobrotinich. Aunque también se proyecta cercar parte de la Reserva, que próximamente contará también con señalizaciones adecuadas.

La editorial : santavictoriaoeste.blogspot.com