Infantería salteña habría disparado a pobladores indígenas para justificar denuncia de Instigación a Cometer Delito

Pobladores de Santa Victoria Oeste denuncian que desde la Secretaria de Seguridad se habría montado un operativo que incluyo inteligencia y filmaciones para avalar la denuncia de apología a la violencia, por la proyección de una película y la presencia de agitadores como lo denuncio ante medios romerista el Secretario de Seguridad de la provincia que tendría el impulso de una cuestionada fiscal.

El gobierno y sus antecedentes de desvirtuar el reclamo social

La intención de desvirtuar los reclamos sociales por parte del gobierno del peronista Juan Carlos Romero en la provincia de Salta tiene antecedentes en los cortes de ruta del año 2001 donde el Secretario de Seguridad, Nallar decía a los medios de comunicación que en el corte de la ruta 34 realizado a la altura de Gral. Mosconi habían agitadores e integrantes de las Fuerzas Revolucionarias de Colombia que estaban infiltrados entre los pobladores. Esta denuncia falaz fue totalmente desechada por la justicia al no haber pruebas de lo de los denunciado. Quedando claro que fue un intento de ensuciar el legitimo reclamo de los pobladores que solicitaban puestos genuinos de trabajo, lo que el gobierno de Romero no garantiza en la provincia de Salta, con más de 600 mil salteños viviendo bajo la línea de la pobreza, de los cuales 250 mil son indigentes.
El gobernador Romero no admitió durante estas protestas sociales el dialogo con los desocupados calificándolos de delincuentes, abalado por su vicegobernador Walter Wayar. Mientras la prensa pagada por el gobierno con dinero publico, presentaba a los dirigentes con fotografías de prontuarios cedidas por la policía de la provincia de Salta, cuando estos dirigentes habían sido detenidos por otras protestas sociales, donde fueron torturados, soportando simulacro de asesinatos, por parte de integrantes de la policía salteña.

Porque la policía salteña disparo sin motivo a pobladores indígenas

En la madrugada del martes 6 de Marzo Carlos Waymas gritaba en la calle que el sacerdote Fernando Beriain incitaba a la violencia, golpeando a patadas la puerta de la vivienda parroquial ubicada en la calle 20 de febrero, sin intervención de la policía cuya Sub Comisaría se encuentra a escasos cincuenta metros del domicilio de los sacerdotes en Santa Victoria Oeste.
Durante la mañana de ese martes unos veinte manifestantes en su mayoría mujeres lograron llegar al colegio 5066, sorprendiendo a la guardia de infantería la que comenzó a realizar disparos y golpeo a las mujeres que tenían a sus hijos en sus espaldas como es tradición de los pueblos ancestrales en la zona.
Mientras en el pueblo se hablaba sobre una denuncia realizada por Dante Atilio Báez, el Director Normalizador cuestionado por 22 comunidades indígenas, y que la misma se habría efectuado en las computadoras de la Colegio de Santa Victoria Oeste, con la finalidad de involucrar al sacerdote Fernando Beriain en apología a la violencia.

Insurgencia Aymara

Durante la noche se proyecta en la plaza del pueblo por pedido de los pobladores la película insurgencia Aymara, realización cinematográfica de la Universidad Mayor de San Andrés de Bolivia y la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación, Centro de investigaciones Interdisciplinarias, la que fue filmada por un camarógrafo de inteligencia de la policía de la provincia de Salta, quien solo registraba en la proyección de la película los bloqueos de rutas en Bolivia.

El allanamiento a la vivienda parroquial fuera de hora legal porque?

El miércoles 7 a las siete de la mañana se presentan en la vivienda parroquial el Sub Comisario de Santa Victoria Oeste, Jorge Hernán Tala junto al Oficial Sub Ayudante Javier Echenique con una orden de Allanamiento emanada por el Juez Marcelo Torres ordenando secuestrar la película insurgencia Aymara, que narra la historia del movimiento indígena boliviano, haciendo lugar al pedido realizado por la Fiscal Correccional Nº 6. A lo que el sacerdote Fernando Beriain aclara que el mismo no estaba encuadrado dentro de la legalidad ya que la orden decía desde las 8 de la mañana.

La entrega de la película y la insistencia de la fiscal

El sacerdote Fernando Beriain accede a entregar la película en cuestión por considerar que no había nada que ocultar y que la misma es un documento fílmico de la historia del movimiento indígena en Bolivia y que la misma incluso participa constantemente de festivales de cine internacionales. Mientras el Sub Comisario de Santa Victoria Oeste, Jorge Hernán Tala se comunica con la Fiscal que interviene en la denuncia, la que según Tala insiste en acelerar el procedimiento.

El jefe del operativo ordena disparar a la manifestación sin motivos

A las diez de la mañana tutores, padres y alumnos de origen Kolla estaban a unos ciento cuenta metros del cordón realizado por efectivos de infantería que a la orden de fuego avanzan disparando a quemarropa sobre los manifestantes buscando que los mismos reaccionen lo que efectivamente se concreta ya que los pobladores se defienden ante el ataque hasta ese momento inexplicable. El Comisario no da explicaciones a la prensa de porque comenzó a disparar. Para luego comunicarse urgente con sus superiores en Salta capital informando de haber sido agredido por pobladores que estaban armados con palos y piedras. Lo que es difundido en Salta como la verdad de lo sucedido.
A las 17 horas notifican de causa por Instigación a cometer delito al sacerdote y a periodista
Ese miércoles a las cinco de la tarde y encontrándose el sacerdote Fernando Beriain junto los pobladores en a unos doscientos metros del Colegio sobre la calle 24 de Septiembre y custodiados por el cordón realizado por infantería el Sub Comisario de Santa Victoria Oeste, Jorge Hernán Tala le comunica que fue citado mediante una cedula de notificación a prestar declaración indagatoria en la causa Nº 4871/07 caratulada “Fernando Beriain y Díaz Muñoz Marcos, por Instigación a Cometer Delito, Amenazas y Coacción Agravadas a Báez Dante Atilio y Otros”.

La fiscal acusó y pidió carátula sin ver la película

La película insurgencia Aymara, junto a las imágenes adjuntadas de la represión del martes 6 de marzo a mujeres de Santa Victoria Oeste y que la fiscal no solicito investigar fue entregada a la nueve y treinta de la mañana al Sub Comisario de Santa Victoria Oeste, Jorge Hernán Tala, quedando labrada un acta de la entrega de la misma. Y que el traslado del material fílmico hasta la Ciudad Judicial demandaría unas 12 horas siendo el promedio de horas de viaje desde Santa Victoria Oeste hasta la capital salteña, y que solo para llegar ala ciudad de la Quiaca se realiza este trayecto en cuatro horas. Es decir que la fiscal y el juez tuvieron recién el material a después de las 19 horas, más lo que habría demandado la proyección de la película en cuestión, es imposible que antes de las cinco de la tarde tuvieran prueba alguna que justificara la carátula de la causa, sin que la misma este encuadrada en ningún tipo de delito.
Lo que consuma la hipótesis de que la policía disparo y provoco a los pobladores para que esto reaccionen ante el ataque para utilizar la denuncia de instigación a cometer delito y que la cuestionada fiscal obrara en cuestión, ratificando una vez más la dependencia del poder judicial al poder ejecutivo.

Ver una película en la plaza pública no es un delito

La exhibición de la película insurgencia Aymara y cualquier otro proyección no configura ningún tipo de delito en una sociedad organizada, y que la misma fue utilizada por mentes obstruidas y con raigambres dictatoriales y autoritarias las que son repudiables para mentar esta falsa denuncia desvirtuando la protesta realizada por 22 comunidades indígenas de origen Kolla que desde hace un año denuncian el nombramiento político del Director Normalizador, el Profesor Dante Atilio Báez.