Se lanzó la fórmula oficialista para las elecciones presidenciales del 28 de octubre
La candidata presidencial reivindicó a Perón y Evita en un Luna Park colmado de peronistas bonaerenses. También a los fundadores del radicalismo, Alem e Yrigoyen, y a socialistas de Juan B. Justo.
La senadora Cristina Fernández de Kirchner y el gobernador Julio Cobos lanzaron ayer la fórmula que comparten como candidatos a presidente y vice del oficialismo. Allí, la primera dama reivindicó el rol de todos los partidos políticos, e hizo un reconocimiento no sólo a Juan Perón y Eva Duarte de Perón, sino también a íconos del radicalismo, como Leandro Alem e Hipólito Irigoyen, o del socialismo, como Juan B. Justo y Alicia Moreau de Justo.
Del mismo modo, llamó a hacer un mea culpa general por los errores cometidos, porque "ninguno de los partidos políticos que hoy tienen responsabilidades en esta historia reciente puede decir lo hemos hecho todo bien. Ahora o décadas atrás nos hemos equivocado. Asumir esas equivocaciones, no para autoflagelarnos sino para no volver a repetirlas, no es un deber, es una obligación".
Sólo pareció dedicar un breve pasaje a los partidos de la oposición, siempre en forma elíptica, cuando convocó a "renunciar a la feria de vanidades y banalidades de individualidades que solamente se reconocen en un ejercicio mediático, pero que no pueden perforar la realidad y transformar esa realidad en función de las necesidades del pueblo", en una clara reivindicación del carácter plural de la Concertación que integran sectores del justicialismo y el radicalismo.
Tanto desde los discursos de la dupla de postulantes, como desde los videos que se proyectaron y la escenografía que se montó en el Luna Park, se buscó apuntalar la idea de unidad entre distintos partidos y sectores sociales como una instancia superadora, inclusive del propio justicialismo.
"Esta Concertación quiere articular representaciones políticas y sociales que superando falsos dilemas y contradicciones se reconozcan en un proyecto de país", sintetizó la candidata presidencial.En el resto de su alocución, la Concertación fue el tópico excluyente: no mencionó lineamientos de gobierno, como lo había hecho en el acto de lanzamiento de su candidatura en La Plata el 19 de julio, y tampoco hizo menciones a temas de actualidad, como al escándalo de la valija con 800.000 dólares retenida a un ciudadano venezolano.
Si bien al iniciar el acto la mayoría de los presentes cantaron a viva voz la marcha peronista, algo que incomodó visiblemente a los gobernadores radicales que apoyan la Concertación, Cristina se encargó de cobijar con sus palabras a los sectores no justicialistas."Gobernar, gestionar es articular los esfuerzos de todos los argentinos para mejorar su calidad de vida. Allí hay gobernadores que no son del partido en el que milité toda mi vida", afirmó la senadora mientras dirigía su mirada hacia el palco principal, donde Kirchner compartía la escena junto a algunos funcionarios y mandatarios provinciales del justicialismo y del radicalismo K.
También recordó cuando en 1972, durante el primer viaje de Perón a la Argentina desde que se había exiliado, el dirigente radical Ricardo Balbín se esforzó por saltar una tapia del patio de atrás de la casa de Gaspar Campos para poder eludir a la multitud que se había congregado y poder saludar al líder del movimiento justicialista.La candidata a suceder a Kirchner apeló a un discurso encendido de carácter entre histórico y académico para explicar las tres dimensiones que motivaron la creación de la Concertación: la institucional, la política y la histórica.
Concertación vs. peronismo
La marcha peronista y algunas consignas contra la UCR que bajaron con insistencia desde las gradas del Luna Park, donde había mayoría justicialista, marcaron una dicotomía con el mensaje integrador transmitido por Cristina Fernández de Kirchner y Julio Cobos desde el escenario.
"El que no salta es radical" y "(...) el que no grita Perón para qué carajo vino", fueron algunos de los cánticos que repitieron en el Luna Park la mayoría de los casi 8 mil presentes, a excepción de un grupo minoritario de radicales.
Si bien estaba previsto que no hubiera símbolos partidarios para no incomodar al sector de los radicales K, la marcha peronista rápidamente prendió en varios funcionarios de primera línea que, ubicados al pie del estadio, se animaron incluso a pegar algún salto entre miradas cómplices.Sólo unas pocas banderas rojas y blancas sirvieron, sin embargo, para marcar la presencia de miembros del centenario partido, y a ellos la propia primera dama agradeció durante su discurso, acallando con voz firme algunos chiflidos.
Un video con imágenes de históricos dirigentes del PJ, la UCR y el socialismo, como Juan Domingo Perón, Ricardo Balbín y Alicia Moreau de Justo, abrió el acto antes de las palabras de ambos candidatos, aunque el clima plural buscado por el oficialismo no pudo evitar que los silbidos bajaran hacia el centro del estadio ante la proyección de fotografías de dirigentes radicales.
Vestida con un tailleur blanco y rosa, Cristina hizo su ingreso tomada de la cintura por Cobos y, al igual que durante todo el acto, se dirigió hacia todos los sectores del estadio para saludar, aunque pocas veces sonrió durante los 40 minutos de discurso.
l presidente Néstor Kirchner siguió de cerca el discurso de su esposa, Cristina Fernández, desde un costado del escenario del Luna Park, donde estuvo acompañado el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, y los gobernadores. Al pie del escenario se agrupaban ministros, secretarios, legisladores e intendentes oficialistas, que buscaban quedar más cerca de las primeras filas, reservadas especialmente para familiares de Cristina y el gobernador Julio Cobos.
En el mismo escenario, junto al Presidente, se ubicaron los gobernadores justicialistas Felipe Solá (Buenos Aires), José Luis Gioja (San Juan), José Manuel De la Sota (Córdoba), Jorge Obeid (Santa Fe) y Mario Das Neves (Chubut). Más atrás se sentaron tres gobernadores "radicales k": Miguel Saiz (Río Negro), Gerardo Zamora (Santiago del Estero), Ricardo Colombi (Corrientes), y entre los que sólo faltó el catamarqueño Eduardo Brizuela del Moral, actualmente más cerca de la conducción nacional de la UCR.
Las definiciones
- "Presidenta, acostúmbrense todos", respondió a quienes cantaban "se siente, Cristina presidente".
- "Tenemos que dar cuenta de la fragmentación política y partidaria que ha tenido nuestro país desde 2001. Esta concertación decodifica y también resuelve interpretar esa realidad que todavía nos lacera y es necesario reconstruir un sistema de representación política en la Argentina".
- "No creo en la generosidad como categoría política, sí creo en la responsabilidad que significa no tentarse con la hegemonía excluyente y tener el ejercicio responsable de profundizar la sustentabilidad de un modelo que les ha cambiado la vida a los argentinos".
- "Hay que renunciar a la feria de vanidades e individualidades que no puede transformar la realidad en función de las necesidades del pueblo".
- "Volver a reconstruir un sistema de representación política amplio, plural, diverso, es también la necesidad de reconocer la profundización de la democracia".
- "Esta concertación quiere vincular representaciones políticas y sociales que, superando viejas antinomias, falsos dilemas, falsas contradicciones, se reconozcan en la construcción de un proyecto de país".